LOS NEONES ANUNCIAN EL DESHAUCIO DE LA PIEL
En los jarrones se desnudan ramilletes
de aliento fúnebre que apestan a invierno
y la luz sólo sabe provocar
brotes de dermatitis sobre el asfalto.
Puede que los árboles exageren
el silencio acusador de la arena,
y haciendo oídos sordos al clamor de los neones
que anuncian el desahucio de la piel,
acaben por ser proscritos para siempre
a bordo de la última nube parturienta.
Hasta puede que el tacto se exilie en los vendajes
que confunden la virginidad del verde
con los pétalos de una rosa en el desierto.
Al final
nos quedará sólo el valor de la derrota
cuando la ingenuidad toque a rebato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario